Invertir en fondos de inversión es una de las opciones más populares para quienes buscan diversificar sus ahorros sin necesidad de elegir cada acción o bono personalmente. Dentro de esta categoría existen dos grandes tipos: los fondos indexados y los fondos gestionados activamente. Cada uno tiene características particulares, ventajas, desventajas y costos distintos. En este artículo te explico en detalle qué son, cómo funcionan, sus comisiones, rendimientos históricos y cuál puede ser la mejor opción según tu perfil y objetivos.
¿Qué son los fondos indexados?
Los fondos indexados son fondos de inversión que replican el comportamiento de un índice bursátil, como el S&P 500, el MSCI World o el Euro Stoxx 50. Esto significa que el fondo compra todas o la mayoría de las acciones del índice en la misma proporción, con el objetivo de igualar su rendimiento. No hay una gestión activa para superar al mercado, sino para seguirlo de cerca.
Ventajas de los fondos indexados
- Comisiones muy bajas
Al no requerir una gestión activa, los fondos indexados tienen costos operativos menores. Las comisiones anuales suelen estar entre 0.05% y 0.3%, lo que los hace mucho más económicos que los fondos gestionados activamente. - Diversificación inmediata
Al replicar un índice amplio, el fondo ofrece exposición a decenas o cientos de empresas y sectores diferentes, reduciendo el riesgo de concentración. - Transparencia
La cartera está compuesta por las mismas acciones del índice, por lo que sabes exactamente qué tienes. - Eficiencia histórica
Estudios y datos muestran que la mayoría de los fondos gestionados activamente no logran superar consistentemente al índice que buscan batir, especialmente a largo plazo. Por eso, replicar un índice es una estrategia popular para muchos inversores.
Desventajas de los fondos indexados
- No intentan superar al mercado
El objetivo es igualar el índice, por lo que no ofrecen potencial para “ganarle al mercado”. - Menos flexibilidad
No pueden reaccionar rápidamente a caídas o cambios del mercado porque deben mantener la composición del índice.
¿Qué son los fondos gestionados activamente?
Los fondos gestionados activamente cuentan con gestores profesionales que analizan empresas, sectores y macroeconomía para seleccionar inversiones con el objetivo de superar el rendimiento del mercado o de un índice de referencia. Estos gestores compran y venden activos según su análisis y estrategia.
Ventajas de los fondos gestionados
- Potencial para superar al mercado
Si el gestor acierta en sus elecciones, el fondo puede obtener rendimientos superiores al índice. - Flexibilidad
Pueden adaptar la cartera rápidamente ante cambios económicos, políticos o sectoriales, intentando proteger al inversor de caídas o aprovechar oportunidades. - Estrategias especializadas
Existen fondos que se enfocan en sectores específicos, crecimiento, dividendos o mercados emergentes, permitiendo un enfoque más personalizado.
Desventajas de los fondos gestionados
- Comisiones más altas
Para pagar al equipo gestor y la investigación, las comisiones suelen oscilar entre 1% y 2% anual, aunque hay fondos con costos aún mayores. - Riesgo de desempeño inferior
Muchas veces, a pesar de la gestión activa, los fondos no logran superar al índice, especialmente después de descontar las comisiones. - Menos transparencia
No siempre es claro qué activos mantiene el fondo en todo momento, pues las posiciones pueden cambiar con frecuencia.
Comparación de comisiones
Las comisiones son un factor crítico en la rentabilidad final de tu inversión. Para ilustrar, si un fondo cobra 2% anual y otro 0.1%, la diferencia puede ser enorme a largo plazo.
Tipo de fondo | Comisiones típicas (TER) | Impacto en la rentabilidad a largo plazo |
---|---|---|
Fondo indexado | 0.05% a 0.3% | Bajo impacto, más rentabilidad neta |
Fondo gestionado | 1% a 2% (a veces más) | Alto impacto, puede erosionar ganancias |
TER: Total Expense Ratio o costo total del fondo.
Rendimientos históricos
Diversos estudios indican que la mayoría de los fondos gestionados activamente no superan a los índices que replican en horizontes largos (10 años o más), principalmente debido a sus mayores costos.
Por ejemplo, según Morningstar y otros analistas:
- Entre 70% y 90% de los fondos gestionados en EE.UU. no superan al S&P 500 a 10 años.
- Los fondos indexados replicando el S&P 500 han entregado una rentabilidad promedio anual cercana al 10% en las últimas décadas.
Esto no significa que no existan gestores que logren superar al mercado, pero encontrarlos y saber cuándo invertir con ellos es difícil para un inversor común.
¿Cuál elegir según tu perfil?
Para inversores principiantes o con poco tiempo
Los fondos indexados suelen ser la mejor opción por sus bajos costos, simplicidad y buen desempeño a largo plazo. Son ideales para construir una cartera diversificada sin complicaciones.
Para inversores que buscan “batir al mercado” y tienen experiencia
Los fondos gestionados activamente pueden ser interesantes, siempre que selecciones gestores con buen historial, pero debes estar consciente de los riesgos y comisiones más altas.
Para quienes buscan una combinación
Una estrategia común es combinar fondos indexados con algunos gestionados, balanceando costos bajos y potencial de rendimiento extra.

Consejos finales antes de invertir
- Consulta el TER: La comisión total del fondo impacta directamente en tus ganancias netas.
- Revisa el historial del gestor: Para fondos gestionados, evalúa el desempeño ajustado por riesgo y costos.
- Considera el plazo: Los fondos indexados son ideales para inversión a largo plazo.
- Diversifica: No pongas todo en un solo fondo o tipo de fondo.
- Entiende los riesgos: Todo fondo conlleva riesgo, incluyendo la posibilidad de perder capital.
Conclusión
Elegir entre fondos indexados y fondos gestionados depende de tus objetivos, experiencia y tolerancia al riesgo. Los fondos indexados ofrecen bajos costos, transparencia y rendimiento sólido a largo plazo, ideales para la mayoría de los inversores. Por otro lado, los fondos gestionados activamente pueden ofrecer potencial para superar al mercado, pero con costos más altos y riesgos de desempeño inferior.
En general, una estrategia sensata para muchos es basar la cartera en fondos indexados, y solo destinar una pequeña parte a fondos gestionados si se está dispuesto a asumir mayores costos y riesgos. Sea cual sea tu elección, siempre infórmate bien y elige productos que se ajusten a tu perfil.